Tras 55 años casado, con 10 nietos y años de activismo familiar, Daniel Arasa cuenta lo que aprendió

Daniel Arasa, veterano periodista,
escribe sobre un tema que controla - el matrimonio

Daniel Arasa, periodista e historiador y padre de familia numerosa, es bien conocido como promotor del cine con valores a través de CinemaNet y de la propuesta de políticas familiares desde distintas asociaciones familiaristas. Muchos lectores de ReligionEnLibertad siguen sus columnas de opinión, análisis y denuncia.

Ahora, con la confianza que da la experiencia, Daniel Arasa habla de lo que ha aprendido en su vida matrimonial a lo largo de 55 años, que es mucho, útil y esperanzador.

Lo hace en su libro ¡El amor de mi vida has sido tú! Reflexiones y vivencias de 55 años de amor conyugal

Cada familia se construye día a día

Arasa ha podido ver que cada familia es una obra de arte, y, por ello mismo, una pieza única que se ha ido construyendo y cultivando día tras día.

Los matrimonios que han sido fieles y han construido juntos un hogar generoso, alegre y abierto a la vida, inevitablemente resultan creativos, porque el amor es creativo.

Daniel Arasa dedica el libro a su esposa Mercè, que es coprotagonista de muchas de las historias que tiene que contar. Ambos entendieron que el matrimonio y la familia es la aventura más importante en la vida: requiere "poner toda la carne en el asador para que salga bien".

Como padre de familia numerosa, abuelo de diez nietos, presidente de asociaciones de padres de alumnos y fundador y director de asociaciones familiares, Arasa ha participado en muchos cursos de formación familiar y ha mantenido una relación intensa con cientos de matrimonios de todas las edades. Y cuenta algunas de las cosas que ha aprendido y le consta que funcionan bien.

No es un libro de recetas, pero sí insiste en una norma básica: vivir el momento presente como si fuera el último de la vida y volverse a enamorar cada jornada y querer hacer feliz al otro.

Aportar cada día un pequeño extra

"La diferencia entre un matrimonio ordinario, del montón, y otro extraordinario no está en los recursos económicos, ni en el nivel cultural, ni en triunfar en la profesión, ni en que los dos sean especialmente simpáticos, ni en hacer cosas notables, sino en aportar día tras día un pequeño ‘extra’. Está en intentar, aunque nunca se consigue del todo, hacer de cada jornada un eterno just married”, afirma Daniel Arasa.

Al mismo tiempo, matiza, "el ‘secreto para la felicidad’ en el matrimonio discurre por caminos de sencillez, sin buscar tres pies al gato ni perseguir la dicha en sí misma".

Atención también a la edad mayor

El libro habla de amor conyugal en todas las etapas de la vida, desde la fogosidad de la juventud hasta la serenidad de la ancianidad.

Incide de manera especial en el de los matrimonios que ya llevan muchos años juntos, aspecto del que se suele escribir y publicar poco. "Están muy equivocados quienes creen que el amor entre los mayores es un cariño de aguas estancadas. Es una etapa en la que el amor matrimonial no solo puede ser fuerte, intenso, sino lleno de entusiasmo y de vibración, aunque sus manifestaciones sean menos expansivas que en la juventud”, afirma el autor.

Entre los temas que aborda están:

- los secretos de un matrimonio feliz;
- el valor de la renuncia;
- la esplendidez del querer-querer;
- la dificultad de conocer del todo al otro;
- la importancia de saber expresar los sentimientos;
- distinguir entre enamoramiento y amor;
- la grandeza de los días grises y de las cosas pequeñas;
- es rentable tener mala memoria;
- no hay que idealizar al otro, ni vivo ni muerto;
- pertenencia y dedicación a los hijos y nietos;
- espíritu joven sin papanatismos;
- querer al otro con sus defectos;
- el control de la imaginación;
- la fuerza de la voluntad;
- el deseo de tantos matrimonios de morir juntos;
- el peligroso concepto de “calidad de vida”;
- las relaciones sexuales;
- el sentido del humor;
- la nostalgia y la soledad;
- los nuevos enamoramientos en la edad madura y en la ancianidad;
- el perdón;
- el victimismo;
- el dolor;
- la fidelidad y la libertad;
- la muerte.

"La convivencia en pareja tiene dificultades, obviamente, pero no es tan difícil como algunos la pintan, incluso cuando los cónyuges son muy distintos. Creo que nuestra experiencia puede ser útil, porque, como ya escribí en un libro anterior, A las 9 en la luna, mi esposa y yo somos como el agua y el aceite, que no se mezclan, y ahí están nuestros 55 años juntos", explica. Sin embargo, a pesar de una vida juntos, Arasa avisa de que “nunca llegas a conocer del todo al otro”.

Arasa considera que amar es, básicamente, querer querer. Eso exige resolución, superarse muchas veces a uno mismo y tener la sensibilidad de detectar grandeza en las cosas de cada día, muchas de las cuales son intangibles. También requiere perdonar y pedir perdón.

El libro finaliza con una reflexión sobre la felicidad, en la que el veterano periodista pone en dudas muchas opiniones que hacen circular algunos "felizólogos".

P.J.G., ReL

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