Cada 1 de noviembre la Iglesia celebra el día de Todos los Santos. Son miles, unos conocidos por todos, otros completamente anónimos. Pero todos coinciden en estar en presencia de Dios.
Para los que aún peregrinan en la tierra, la vida y el ejemplo de los santos pueden ser una ayuda para alcanzar precisamente el cielo, la meta a la que todo cristiano está llamado.
La editorial Edibesa publicó una colección titulada 366 textos... Cada librito estaba dedicado a un santo y recogía reflexiones diarias con textos propios de cada uno de estos personajes.
La pedagogía del héroe (en otro tiempo los santos) entró en crisis hace décadas pero no para abolirlos, sino para sustituirlos: los santos fueros sustituidos por cantantes, actores, deportistas de fama… es decir, los nuevos héroes. Sin embargo, esos ejemplos y modelos son perecederos, mientras que el ejemplo de los santos perdura de generación en generación.
El padre Pablo Cervera, director de la revista Magnificat y colaborador de ReL, fue autor de algunos de estos libritos y hace una selección de algunas frases de santos que serán de gran ayuda en la batalla espiritual diaria de cada católico:
1. Santa Teresa de Calcuta
Fundadora de las Hermanas Misioneras de la Caridad (1910-1997).
«Hay que dar lo que os cuesta algo. No es suficiente dar de lo que os sobra, de lo que podéis prescindir, sino también de lo que no queréis prescindir, cosas a las que estáis apegados».
2. San Alberto Hurtado
Jesuita chileno fundador del Hogar de Cristo. Gran apóstol de la juventud y de los pobres. En su país es patrono de los trabajadores (1901-1952).
«La acción tiene sus peligros: obrar por obrar; obrar por afirmarse, obrar por brillar, obrar por dominar. Ver demasiado grande. Querer el éxito a toda costa. Querer ir demasiado a prisa. Perder el contacto con Dios».
3. San Rafael Arnáiz (Hermano Rafael)
Joven monje trapense, uno de los grandes místicos del siglo XX. Sus numerosos escritos se han difundido ampliamente. Fue canonizado en el año 2009 (1911-1938).
«Vida de amor... He aquí la única razón de vivir»
4. Santa Genoveva Torres Morales
Fundadora de la Congregación de Hermanas del Sagrado Corazón de Jesús y de los Ángeles, cuyo carisma es ayudar a las ancianas en la soledad de sus últimos años de vida (1870-1956).
«Sé alma de oración y mortificación. Su fruto será la humildad bien practicada. De practicar bien el tiempo de oración, sale el conocer a Dios y a sí mismo. Vida interior, Madre; ella, instintivamente, nos llevará a amar a Dios, sólo a Él, pues lo demás es basura».
5. Santa Faustina Kowalska
Religiosa polaca, apóstol de la Divina Misericordia. En su Diario recogió los mensajes recibidos de Jesús (1905-1938).
«Debes mostrar misericordia al prójimo siempre y en todas partes. No puedes dejar de hacerlo, ni excusarte, ni justificarte».
6. San Carlos de Foucauld
Militar y explorador, se hizo sacerdote. Murió asesinado por una banda de forajidos en el Sáhara argelino (1858-1916).
«La acción de gracias debe tener una parte muy importante en nuestra oración, la palabra «gracias» debe estar al inicio de todas nuestras oraciones, porque la bondad de Dios precede todos nuestros actos, envuelve todos los instantes de nuestra vida».
7. Santa Ángela de la Cruz
Religiosa sevillana (1846-1932), fundadora de la Compañía de la Cruz, fue canonizada en Madrid por Juan Pablo II el 4 de mayo de 2003
«En el bajar está el subir y en la humillación está la exaltación. Si fuera lo contrario: en el subir está el más subir y en la exaltación está más y más la exaltación, todas podríamos decir: «Eso no está en mi mano»; pero como está en bajar y en humillarse, eso está en manos de todas y al alcance de todos los más ignorantes, cuando tienen ganas de santificarse».
8. Santa Gema Galgani
Joven mística pasionista italiana que recibió los estigmas de la Pasión (1878-1903)
«El que no trata con confianza a Jesús, hace injuria a su bondad, que tantas veces y de tan diversas maneras se nos ha demostrado; me parece que teniendo con Jesús mucha confianza se le hace una como dulce violencia para que derrame sus gracias sobre nosotros: ¿no es verdad?»
9. San Juan María Vianney, Santo Cura de Ars
Conocido como el Santo Cura de Ars, en el año 2010 Benedicto XVI lo nombró patrono de los sacerdotes (1786-1859)
«Todos los males que nos agobian en la tierra vienen precisamente de que no oramos o lo hacemos mal».
10. Santa Teresita del Niño Jesús
También llamada Teresita de Lisieux, carmelita descalza; es doctora de la Iglesia (1873-1897)
«Yo me considero un débil pajarito cubierto únicamente por un ligero plumón. Yo no soy un águila, sólo tengo de águila los ojos y el corazón, pues, a pesar de mi extrema pequeñez, me atrevo a mirar fijamente al Sol divino, al Sol del Amor, y mi corazón siente en sí todas las aspiraciones del águila...»
11. San Claudio la Colombière
Jesuita francés, misionero y autor de obras de espiritualidad. Dirigió espiritualmente a santa Margarita Mª de Alacoque y propagó por todas partes la devoción del Corazón de Jesús (1641-1682).
«El amor a Dios todo lo hace suave».
12. Santa Margarita Mª de Alacoque
Religiosa francesa de la Orden de la Visitación. (1647-1690). Es conocida por haber recibido las apariciones del Sagrado Corazón de Jesús en Paray-le–Monial. Fue ayudada por san Claudio de la Colombière.
«Ten gran confianza en Dios: su misericordia supera infinitamente todas nuestras miserias».
13. San Francisco de Sales
Obispo de Ginebra, fecundo autor espiritual y doctor de la Iglesia. Es patrono de los periodistas (1567-1622).
«Puesto que el corazón de nuestro Salvador no tiene otras leyes que la dulzura, humildad y caridad, nosotros actuaremos siempre conducidos por este suave yugo.
14. San Juan de La Cruz
Nace en Fontiveros, Ávila. A instancias de santa Teresa, fue el primer religioso del Carmelo reformado. Doctor de la Iglesia por sus escritos místicos (1542-1591).
«A la tarde te examinarán en el amor; aprende a amar como Dios quiere ser amado y deja tu condición».
15. San Juan de Ávila
Sacerdote secular español y gran autor espiritual, es llamado el «Apóstol de Andalucía». Renovador de la Iglesia, se anticipó a las reformas del Concilio de Trento. Estuvo en relación con los grandes santos españoles de su época (Ca. 1499-1569).
«Ésta es, señores, muy buena devoción de la Virgen, seguir sus virtudes».
16. San Francisco Javier
Jesuita español del grupo de primeros compañeros de san Ignacio de Loyola. Evangelizador de la India y el Japón. Patrono de la misiones (1506-1552).
«No hay que hacerse ilusiones. Nadie puede ser excelente en las cosas grandes, si primero no lo es en las pequeñas».
17. San Ignacio de Loyola
Fundador de la Compañía de Jesús. Autor de los Ejercicios Espirituales (1491-1556).
«Pedir gracia a nuestro Señor para que no sea sordo a su llamamiento, sino presto y diligente para cumplir su santísima voluntad».
18. San Felipe Neri
Apóstol de Roma. Nació en Florencia y murió en Roma. Fundó la Congregación del Oratorio. Brilló por sus obras de caridad con el prójimo, por su sencillez y su alegría (1515-1595)
«Conservar el buen humor en medio de las penas y enfermedades, es señal de alma recta y buena».
19. Santo Tomás Moro
Hombre de estado inglés, canciller del rey Enrique VIII, que lo mandó decapitar por no prestar el juramento antipapista frente al surgimiento de la Iglesia anglicana y por oponerse al divorcio con la reina Catalina de Aragón (1478-1535)
«Dame el pan de cada día, un poco de mantequilla, una buena digestión y algo para digerir».
20. Padres de la Iglesia
Se ha elegido una frase de San Policarpo (69-155 d.C), que fue discípulo de San Juan Evangelista.
«Hace ochenta y seis años que le sirvo y no me ha defraudado».
ReL
Vea también Vocación Cristiana, Vocación a la Santidad
No hay comentarios:
Publicar un comentario