«Es un desastre, se ha perdido todo», el arzobispo de Santiago de Chile sobre los incendios

 

"La situación es realmente trágica, es una catástrofe. El número de muertos hasta ahora es de 150, y hay muchos heridos y desaparecidos. Las personas afectadas lo han perdido casi todo, muchas casas, edificios enteros y varias escuelas han quedado destruidas", ha declarado a la Agencia Fides el Arzobispo de Santiago, Fernando Chomalì Garib.

Puedes colaborar en este enlace de Cáritas Chile.

Sigue aumentando el número de víctimas del devastador incendio que asoló la región costera de Valparaíso el pasado viernes 2 de febrero. "En Viña del Mar, una parroquia y una capilla han quedado completamente destruidas. Lo mismo en Quilpué y en Villa Alemana", señaló el obispo de la Diócesis de Valparaíso, Jorge Vega Velasco.

Donaciones y oraciones

Las operaciones de extinción de incendios siguen en curso, ya que los fuertes vientos han avivado las llamas. El domingo 4 de febrero se registraron 165 incendios, 40 de los cuales siguen fuera de control.

Hasta el momento, las ciudades de Viña del Mar, Quilpué y Villa Alemana, que cuentan con más de 326.000, más de 127.000 y más de 144.000 habitantes respectivamente, se encuentran gravemente afectadas.

El Servicio Nacional para la Prevención y Atención de Catástrofes (Senapred) ha reportado veintiséis mil hectáreas de vegetación y varios residenciales consumidos por las llamas.

"Recemos por los muertos y heridos en los devastadores incendios que asolan el centro de Chile", exhortó el Papa el pasado domingo durante el rezo del Ángelus.

Por su parte, Cáritas Chile y Cáritas Valparaíso han lanzado una campaña de recaudación de dinero para apoyar a las víctimas de los incendios forestales que afectan a diversos puntos de la región, principalmente a Viña del Mar, Quilpué y Villa Alemana.

Mientras, varios obispos han convocado a cadenas de oración para rezar y pedir por las víctimas de los incendios, sus familias y comunidades, y también por todos los organismos que están trabajando desplegados en terreno para controlar los incendios y asistiendo a los vecinos afectados.