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Colombia ha despenalizado el aborto hasta los 6 meses y tú puedes decir algo, hacer algo
«Hemos repudiado el silencio vergonzoso»
II Corintios 4
La Biblia se refiere al demonio como el príncipe de este mundo (Juan 12, 31) No necesitas estudiar teología o demonología para darte cuenta que el demonio tiene tres metas fundamentales:
1DESTRUIR LA CREACIÓN DE DIOS.
2DESTRUIRNOS A NOSOTROS.
3ARREBATARNOS UNA MARAVILLOSA ETERNIDAD AL LADO DE DIOS.
Y es tan astuto que no lo hace directamente, no tiene que salir de las sombras donde hábilmente se oculta.
Usa presidentes, diputados, jueces, periodistas, mineras y ayudantes que actúan a su favor con leyes antinaturales y contratos con mineras que devastan la naturaleza.
Un recuerdo a Colombia
En Colombia, un país hermano, acaban de aprobar el aborto de seres humanos en estado avanzado de gestación.
A mis hermanos colombianos y a su presidente deseo recordarles este mandamiento de Dios:
NO MATARÁS
Y estas palabras de las Sagradas Escrituras:
“Hay que obedecer a Dios antes que a los hombres”.
Hechos 5
Eliminar una vida humana
El papa Francisco ha dicho sobre el aborto:
«¿Es lícito eliminar una vida humana para resolver un problema? ¿Es lícito contratar a un sicario para resolver un problema?».
¿Has leído los titulares de grandes medios noticiosos, cómo celebran este crimen abominable a los ojos de Dios?
“Es histórico’: Colombia despenaliza el aborto y se une a la marea verde”.
“Colombia logra un avance histórico al despenalizar el aborto hasta la semana 24”
El aborto, ¿un derecho?
Y lo más absurdo, el Ministerio de salud de Colombia tiene estas palabras alucinantes que tomé de su página web:
“En Colombia la Corte Constitucional reconoce que la interrupción voluntaria del embarazo es un derecho íntimamente ligado al derecho a la vida.”
¿Matar una criatura inocente, un niño o una niña, es un derecho ligado al derecho a la vida?
Esos pomposos titulares de diferentes diarios me hicieron recordar estas palabras que leí en Mateo 12, 36:
Os digo que de toda palabra ociosa que hablen los hombres darán cuenta en el día del Juicio
24 semanas
¿Sabes cómo es un bebé con 24 semanas? Puedes preguntarle a tu médico, buscar una imagen o leer información básica en Internet. Te convencerás que es un crimen atroz el aborto.
Leí que un bebé en las 24 semanas de embarazo:
- Mide casi 24 centímetros y pesa más de 700 gramos y continúa creciendo a ritmo sostenido.
- Abre y cierra los ojos con frecuencia. Ya tiene pestañas y cejas.
- A partir de este punto tu bebé es capaz de sobrevivir si se produjera el parto, mediante los adelantos tecnológicos en la medicina.
- Ya puede abrir sus ojos y diferenciar perfectamente la luz de la oscuridad.
- Se chupa el dedo.
Defiende la vida
Tú que lees estas palabras… No temas levantar tu voz en favor de la vida.
¿Eres católico y periodista? Defiende la vida con tus escritos. La Biblia en Josué 1, 9 te dice:
Yo soy quien te manda; esfuérzate, pues, y sé valiente. No temas ni te asustes, porque contigo está Yavé, tu Dios, adondequiera que vayas
Sin miedo
Y como si esto fuera poco, te dice 365 veces “No tengas miedo”, una vez para cada día del año.
La abundancia de mal se vence con abundancia de bien. Eleva a Dios tus plegarias, reza.
Da a conocer tu opinión como creyente. Defiende la vida. No calles aceptando estos crímenes.
Lleva bondad y misericordia al mundo
Los católicos tenemos un tesoro para compartir e iluminar el mundo, llenarlo de bondad y Misericordia.
“Llevamos este tesoro en recipientes de barro para que aparezca que una fuerza tan extraordinaria es de Dios y no de nosotros. Atribulados en todo, mas no aplastados; perplejos, mas no desesperados; perseguidos, mas no abandonados; derribados, mas no aniquilados».
II Corintios 4
Cuando escuches alguna persona opinar de esta forma: “No estoy de acuerdo, pero ya que es inevitable”, sabrás por qué en el mundo hay tanta maldad.
Apocalipsis 3 señala este tipo de actitud:
«Conozco tus obras: no eres ni frío ni caliente. ¡Ojalá fueras frío o caliente!».
Hay una frase que circula en Internet y se le atribuye a santa Catalina de Siena. Es muy apropiada para mis hermanos colombianos y de otros países donde se ha aprobado este crimen contra la humanidad.
“¡Basta de silencios! ¡Gritad con cien mil lenguas porque, por haber callado,
el mundo está podrido!”
Levanta tu voz, hermano católico. ¡No calles!
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