Vivimos en un mundo hipersexualizado, un mundo en el que cada vez más se venden más y más cosas a través del sexo. Pero lo más duro es la cantidad de sexo que se vende. Adicción a la pornografía, prostitución, tráfico de personas, de mujeres, hombres y niños, es cada vez más común.
Es muy duro pensarlo, pero la verdad es que todas estas realidades están conectadas las unas con las otras.
¿Cómo iniciamos?
Lo que te voy a decir puede ser que no te guste al principio y me digas que satanizo todo. Pero cuando trivializamos la música, los videos musicales, las películas, las series que vemos, en las que cada vez aparecen más escenas con sexo y cada vez son más explicitas, vamos, poco a poco, perdiendo la sensibilidad ante aquello que debería ser tratado como algo sagrado. Vamos normalizando escenas que hacen parte de la intimidad de dos personas que se aman en presencia de Dios.
No te voy a decir que todas las escenas románticas deben sacarse de las películas. Pero sí te pregunto, ¿crees que la cantidad de escenas que se muestran en una serie o película son verdaderamente necesarias para la historia de la misma?
Esto lo dejo a tu discreción. No te voy a decir qué hacer o qué no hacer. Pero sí creo que poco a poco se le va abriendo la puerta a una realidad muy dañina, como lo es la pornografía.
¿Hasta dónde está bien?
Muchas veces, al hablar con jóvenes sobre castidad, me he encontrado con esta pregunta ¿hasta dónde puedo llegar para que no sea pecado?
Mi respuesta siempre es que la pregunta no es sobre los límites. La pregunta está en el amor, en la intención de lo que hacemos. La pregunta es «¿cómo te puedo amar más y mejor?». «¿Cómo no busco mi propia satisfacción utilizando a la persona que tengo en frente?»
Esto, llevado a la pornografía, «¿cómo puedo respetar la intimidad de esta persona que es mi hermana en Cristo?».
Si es un trabajo, ¿por qué irrespeto la dignidad de la persona?
Esta es otra pregunta con la que me enfrento. Las personas que se dedican a la pornografía reciben un salario por su «trabajo». Y si no se consume se quedarán sin trabajo.
La respuesta que doy a mis alumnos es: un trabajo de vendedor implica vender un objeto. Y el cuerpo de la persona no es un objeto. Las personas no estamos a la venta. No es digno tratar a una persona como algo que se utiliza y se desecha, aun si la persona misma lo ofrece.
Lo que debemos hacer es ayudar a las personas a recuperar su sentido de ser, su valor, no aprovecharnos de su debilidad para usarlas como cosas.
¿Cómo luchar contra la adicción?
Ahora bien, después de abrir la puerta, podemos evidentemente cerrarla y redireccionar o seguir abriendo puertas, buscando cada vez más satisfacción en lo que vemos.
Recordemos que cuando vemos series, películas, escuchamos diferentes tipos de música, sentimos placer y puede ser que, poco a poco, lo que sentimos ya no sea suficiente para satisfacernos y empecemos a buscar un poco más.
Estando la industria de la pornografía tan accesible, buscar y encontrar ya no es difícil caer en una adicción. Una necesidad de ver pornografía es más común de lo que te imaginas.
Ahora te dejo con una serie de recursos que te pueden ayudar a ti o a alguna persona que conozcas que esté enfrentándose a una situación como esta.
Recursos para dejar la pornografía ¡para siempre!
Porno Detox
Es un plan de 14 días para luchar en contra de la adicción. Lo único que hay que hacer es inscribirse con un correo electrónico y recibir diariamente una serie de motivaciones para vencer el deseo de consumir pornografía.
A lo largo de los 14 días la persona tomará conciencia de quién es y de quiénes son las personas a las que se observa. Logrará ir más allá de un hábito para llegar a la introspección, a través de ejercicios que le ayudarán a tomar la decisión de tener un cambio positivo en la vida que le ayudará a sanar las relaciones consigo mismo y con los demás.
Puedes ver más de esto aquí.
Ebook gratuito: «Derrotar la pornografía»
Este libro de 110 páginas escrito en colaboración entre Educatec y Catholic Link y dividido en dos grandes partes. Primero la adicción digital y después la pornografía.
Está centrado en el análisis de ambas realidades, seguido de una serie de ejercicios y de testimonios que pueden ayudar al lector a comprender lo que son las adicciones y como luchar contra ellas y ver que otras personas han triunfado allí donde él o ella están luchando.
Puedes descargarlo aquí.
Documental Brain, Heart, World de la fundación: Fight the new drug.
Desde el año 2009 la fundación Fight the new drug (Lucha contra la nueva droga) ayuda a personas a tomar decisiones informadas respecto a la pornografía. Es una organización, sin ánimo de lucro, que se dedica a despertar la conciencia con respecto a los efectos nocivos que tiene el consumo de pornografía en el cerebro. Y, por ende, en las relaciones humanas.
Por medio de Crowdfunding, esta organización desea realizar un documental en el que se haga visible no solo los efectos del consumo, sino diferentes testimonios de personas que han luchado contra la adicción a la pornografía y la han superado.
Puedes verlo aquí.
Te animo a conocer estos recursos, la adicción a la pornografía es más común de lo que te imaginas. Nunca sabrá si simplemente hablando de estos temas con tu grupo de amigos puedas estar ayudando a alguno que puede estar luchando de manera secreta con esta adicción.
María Claudia Arboleda, catholic-link
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