Cuenta ya con más de millón y medio de participantes y ahora prepara su expansión por el continente americano
Empezó en 1986 como una iniciativa local en Terrassa, ciudad de una diócesis de Cataluña, con la misión de ayudar al anuncio de la Palabra de Dios a los estudiantes, en un formato de concurso bíblico.
Su fuerza ha conseguido que el Papa Francisco se haya interesado por esta idea y haya pedido a sus impulsores que ayuden a hacerla crecer en otros lugares del mundo.
¿El secreto? Motivar a niños y niñas, así como a jóvenes para que interactúen con una frase-tema de la Biblia a través de un trabajo personal en formato concurso.
El concurso bíblico, que era de ámbito sólo catalán, y desde hace tres años se ha ampliado a todas las comunidades de España, se va a expandir próximamente, en su primera etapa, por América.
En Cataluña, el concurso, vinculado a la Federació de Cristians de Catalunya, fundada en los años 30 del siglo pasado para dar cohesión a los jóvenes católicos, llega ya a su trigésimo cuarta edición.
El objetivo es claro: llegar a las nuevas generaciones para que conozcan y utilicen la Biblia, la reconozcan como Palabra de Dios y tengan la oportunidad de hacer un “encuentro, personal y libre, con la persona de Jesucristo”.
Pere Casas, responsable y coordinador del concurso, y el sacerdote Fidel Catalán, consiliario del Grup Avant (promotor del concurso en Cataluña), recuerdan a Aleteia.org que en su primera edición, hace 33 años, sólo participaron 369 estudiantes.
Desde hace más de una década, cada año, participan entre 50.000 y 70.000 jóvenes de más de 500 centros escolares con un total acumulado de más de un 1.500.000 participantes.
El formato concurso se presenta en varios niveles de edad y modalidades, desde la modalidad de cuestionario, redacción, pintura, dibujo, aplicaciones tecnológicas hasta la de talleres bíblicos.
Se otorgan más de 300 premios, personales y de grupo, y todos los participantes reciben un obsequio de participación que apoye la acción bíblica.
La frase que guía el 34 concurso en este 2019 es la cita bíblica “No tengas miedo, yo estoy contigo”, del profeta Isaías (Is 43,5) que el participante personaliza para trabajarla con “No tengas miedo, mi nombre, yo estoy contigo”.
Jaume Vernet, del equipo de trabajo del concurso, explica a Aleteia.org que la organización del concurso implica disponer de un pequeño equipo permanente de cristianos (mucho mejor si es ecuménico) dispuestos a trabajar con talante apostólico y profesional a llevar la semilla de la Palabra de Dios, en un “saco” rotulado “concurs bíblico”.
El concurso interpela a adolescentes y jóvenes “para sembrar con la actitud del pobre de espíritu, del que sabe que el que da el fruto deseado es sólo el mismo Dios. De Él es el mérito”.
En Cataluña el concurso acepta trabajos hasta el 15 de febrero de 2019, y las inscripciones se realizan a través de los mismos centros escolares, siendo el profesorado los que reparten el material de participación de las diferentes modalidades a sus alumnos.
No se trata de una iniciativa para escuelas católicas sólo, sino que está abierta y deseada la participación de todo tipo de centros, y son muchas las escuelas públicas que participan (gracias a los profesores de religión). En el mes de mayo se entregan los premios y obsequios en cada una de las diócesis. Lo normal es que su obispo presida el acto.
En el resto de la península ibérica, el Concurso Bíblico Escolar acepta trabajos hasta el 30 de junio y en septiembre hará entrega de los premios.
Más información del Concurs Bíblic de Catalunya y del Concurso Bíblico Escolar, en las otras comunidades de España, en www.concursbiblic.com o a través del correo info@concurbiblic.com
Miriam Díez Bosch, Aleteia
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